Piel Sensible vs Piel Alérgica: evidencias y cuidados

Piel Sensible vs Piel Alérgica: evidencias y cuidados
¿Tienes una piel reactiva? ¿Se enrojece fácilmente o incluso te pica a veces?, entonces… ¿qué es? Una piel alérgica o simplemente sensible. Aunque no lo parezca, hay diferencias entre estos dos tipos de piel y, aunque debe ser un dermatólogo quién lo determine para recomendarte el tratamiento adecuado, nosotros vamos a tratar de explicarte las principales diferencias, por si podemos ayudarte un poco…

Piel sensible: definición

Piel sensible También llamada piel reactiva, intolerante o híper excitable. Muy difícil de diagnosticar para un médico dermatólogo, ya que los síntomas que aparecen son muy similares a la piel alérgica. A lo largo de muchos años se han propuesto varias definiciones, pero ninguna ha sido capaz de hacerlo con exactitud. La definición de Piel Sensible hace referencia a una hipersensibilidad desagradable e incómoda para la persona que la padece, hasta el punto de afectar incluso su calidad de vida.

Un problema cada vez más frecuente

Hoy en día cada vez se ven más personas con este tipo de problema. Basándonos en diferentes tipos de encuestas, realizadas de manera rigurosa, se estima que aproximadamente un 50% de las mujeres en Estados Unidos y Japón, y un 30% de los hombres describen tener este problema en su piel. En países Europeos, tales como Francia, Italia, Portugal, Alemania, Suiza, Bélgica y Grecia casi un 40% de cada 5.000 habitantes, afirman tener una piel muy sensible. En nuestro país, la prevalencia es realmente alta, casi 11 millones de españoles tienen este tipo de problema. En relación con la raza, en algunos estudios se ve que la raza negra tiene menos sensibilidad que los caucásicos y estos, menos que los asiáticos, pero son hipótesis que no se han podido confirmar, a esto se suman otros factores de incidencia como son los factores psicosociales, culturales, la higiene diaria corporal o algunos tipos de dietas, como por ejemplo los asiáticos, que reaccionan más intensamente a las comidas especiadas.

Causas

Es un problema multifactorial donde la hiperactividad cutánea puede ser de origen genético, pero su manifestación también puede desencadenarse por diferentes factores. En pieles intolerantes, sensible o hiperactivas, la reacción es inmediata, al contrario de una reacción alérgica. Factores extrínsecos frente a los cuales reacciona este tipo de piel:

Cosméticos y productos de aseo:

El uso de productos cosméticos no adecuados al tipo de piel, es el desencadenante más frecuente. Hay muchos irritantes en la formulación de un cosmético, como, por ejemplo: alcohol, propinenglicol, butilenglicol, resorcina, ácido tricloroacético, alfahidroxiácido, etc., que según su concentración pueden ser a menudo irritantes y por lo tanto un agravante en pieles sensibles. También hay ciertos procedimientos cosméticos físicos como la fototerapia, la radiación ultravioleta (sol), la dermoabrasión, peelings químicos, láser, etc., que pueden agravar notoriamente este problema cutáneo.

Factores ambientales:

Los factores ambientales también son factores desencadenantes de este síndrome.
  • el descenso de la temperatura y de la humedad: el frío, el sol, el viento, la contaminación, el aire acondicionado afectan directamente la cantidad acuosa del estrato córneo, que es la capa de la piel más superficial, y esto hace que la sensibilidad aumente.
  • la dieta: especias, alcohol, café, picantes.
  • las prácticas de higiene corporal: técnicas de afeitado en hombres, duchas excesivas.
  • el abuso del uso de productos de higiene corporal.
  • actividades laborales en las que hay exposición a diferentes productos químicos.

Factores intrínsecos:

  • Hay varios factores propios en personas que tienen este tipo de problema. Por ejemplo, se da mucho más en el sexo femenino, en jóvenes, en pieles claras, susceptibles a la quemadura solar (foto tipos 1 y 2), susceptibilidad al rubor y/o enrojecimiento, pigmentación de la piel, estrato córneo delgado, disminución de la hidratación del estrato córneo, interrupción del estrato córneo, inervación epidérmica aumentada, aumento de las glándulas sudoríparas, disminución de los lípidos, nivel alto de pérdida transepidérmica de agua…
  • También los factores psicológicos tienen una gran incidencia en este tipo de piel. El estrés es el más importante de ellos, aunque también otros factores psicológicos depresivos o neuróticos pueden influir.

Características de la piel sensible

Hay varios signos asociados a la piel sensible como son: enrojecimiento, arañitas vasculares y descamación, a los que hay que sumarle picazón, ardor, escozor y sensación de tirantez de la piel. La localización más común es la piel facial, pero también se puede manifestar en las manos, cuero cabelludo y pies.

Cuidados piel sensible

Si tienes este tipo de piel es muy importante tengas en cuenta varios puntos:
  • Es fundamental mantengas tu piel muy bien hidratada
  • Hidrata la piel de todo el cuerpo siempre después de la ducha, y la de la cara por la mañana y antes de dormir
  • Utiliza agua tibia y que tus duchas no sean muy largas
  • Utiliza siempre productos cosméticos sin perfume, colorantes, alcohol, y lo ideal es que estén indicados para pieles sensibles.
  • Intenta no exponerte mucho al sol, es un gran irritante para la piel. Utiliza protectores solares con FPS alta
  • Evita, en lo posible, el estrés y la fatiga
Cosméticos para piel sensible - Optimal Renewal

Cosméticos aconsejados para la piel sensible

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Cómo reacciona una Piel Alérgica

En las pieles alérgicas el mecanismo de acción es diferente respecto a la piel sensible. Piel alérgica En las pieles alérgicas está implicado el sistema inmunitario. Esto sucede cuando nuestro cuerpo se pone en contacto con una sustancia que resulta desconocida o extraña y el cuerpo reacciona de manera exagerada, siendo la piel un órgano muy afectado. La mayoría de veces no ocurre la primera vez del contacto con la sustancia o alérgeno, generalmente se desencadena al poner en contacto la piel repetidas veces en contacto, produciéndose una reacción alérgica de tipo inflamatoria. A esto se le llama “hipersensibilidad retardada”. Se llama alérgeno a esta sustancia extraña para tu piel, y anticuerpo a la sustancia que fabrica tu cuerpo para combatir a la sustancia desconocida. Es muy normal que exista confusión entre lo que es una piel sensible y una piel alérgica. Lo importante es que, si ves que tu piel “reacciona” frente algún factor, acudas a tu médico dermatólogo para que pueda realizar un buen diagnóstico y te indique un tratamiento adecuado para tu problema. Las lesiones que aparecen en la piel son de varios tipos: enrojecimiento, inflamación, descamación, costras, vesículas, picor, tirantez, etc.

Tipos de sustancias alergizantes o alérgenos

  • Perfumes y fragancias: estas sustancias aparecen en varios la mayoría de productos cosméticos, por ejemplo: lociones, champús, toallitas para retirar el maquillaje, productos de limpieza para el hogar, etc. Por lo tanto, procura siempre comprar productos libres de fragancias.
  • Níquel: este metal se encuentra presente en joyería de fantasía, algunas piezas con oro y piercings. El problema suele aparecer sobre todo en las orejas. Otros productos donde puede haber níquel es en relojes, armazones de gafas, cierres, botones, cinturones, cierre de sujetadores, etc.
  • Látex: cada vez es más común encontrarse este tipo de alergia, porque cada vez más es utilizado en diferentes productos. Por ejemplo, en guantes, ropa, cintas para el pelo, preservativos, y muchos otros productos. La alergia puede aparecer desde como un simple enrojecimiento en la piel, hasta en dificultades para respirar y vómitos.
  • Tintes de pelo: una de las sustancias más alergizantes en este tipo de cosmético es el PPD (parafenilenodiamina). Este tipo de sustancia está en la composición química del tinte, así que debes tener especial cuidado y revisar los ingredientes cuando lo compres o cuando vayas a la peluquería.
  • Telas y tejidos: muchas personas piensan que son alérgicas a la lana, y en realidad muchas veces no se trata de alergia sino de sensibilidad.
Los materiales textiles que provocan más alergias son los derivados de resinas de formaldehídos. Este material se usa sobre todo en prendas elásticas a prueba de agua, arrugas y encogimiento. Así que, si tienes este tipo de alergia, busca prendas libres de formaldehídos. En muchos casos, si la alergia es ligera, se puede solucionar lavando la prenda repetidas veces.
  • Cosméticos: muchas veces se trata directamente de la fragancia o conservantes. Los más comunes son formaldehídos, parabenos o timerosal. Lo importante es dejar de usarlos y vigilar la formulación del nuevo cosmético.
  • Medicamentos tópicos: una de las sustancias más alergizante en medicamentos de uso tópico (ungüentos y antibióticos) es la neomicina. Es muy importante que tu médico alergólogo se asegure que no eres alérgico a esta sustancia, y en caso de que así sea debes comunicarlo siempre.
  • Protector solar: En ocasiones alguno de los componentes de las cremas solares podrían reaccionar cuando te expones al sol. Por ejemplo: PABA (ácido parabenzoico), benzofenonas, oxibenzona, salicilatos, ciclohexanol.
  • Productos del hogar: Los productos más alergizantes son los que contienen adhesivos y solventes. Por ejemplo, diluyentes de pinturas, carbón líquido para mecheros, o quita esmalte para laca de uñas.
Como ves estamos expuestos a muchísimas sustancias alergizantes. Por eso, cada vez más, es importante prestar atención a los componentes de los productos que consumimos. Nuestro consejo es que, si padeces este tipo de síntomas, enrojecimientos, erupciones, picores, intolerancias frente a cosméticos, descamación, etc. consultes a tu médico dermatólogo para que te realice un correcto diagnóstico y así puedas evaluar productos. Es muy importante que tengas claro que si tu piel es sensible o eres alérgica debes cuidarte correctamente.