¡Cuidado con el frío! Cuida y protege tu piel también en invierno
09 enero, 2018
No sólo la primavera y el verano dañan nuestra piel, hay que tener una serie de precauciones también en invierno, más todavía si somos amantes de los deportes de invierno.
Tenemos dos meses por delante de escapaditas a la nieve, bien porque seas amante del esquí o del snowboard o bien porque quieras disfrutar del maravilloso espectáculo que ofrece la naturaleza en esta época del año. El invierno es también bonito y hay qué disfrutarlo.
¿Sabes que el frío y el sol de alta montaña pueden acelerar el proceso de envejecimiento de tu piel, causar sequedad y alergias?
Olvídate de la moda de los 90 de llegar el lunes a la oficina rojo cual pimiento y con las gafas bien marcadas en tu rostro. Ahora lo que tienes que procurar es llegar sin señales de tu magnífico fin de semana en las pistas. No somos conscientes de que la nieve refleja un 80% los rayos del sol (la arena de la playa sólo lo hace en un 15%) y a esto hay que añadir que la radiación solar es mucho más potente a partir de los 1000 m de altitud, Teniendo en cuenta que solemos esquiar a unos 2000m...Vamos a darte una serie de consejos para no sufrir las consecuencias negativas del frío y el sol:
- Mantenerte protegido en todo momento con un FPS elevado, el ideal sería de 50. y recuerda aplicarlo media hora antes de iniciar la actividad al aire libre. Renueva cada 2 horas y recuerda que los días nublados también hay que protegerse.
- El viento es otro enemigo de la piel. La deshidrata, provoca tirantez y la vuelve más sensible. No olvides estos días aplicar serum, crema hidratante y contorno de ojos.
- Al igual que el contorno de los ojos, que puede estar más protegido por las gafas de sol, los labios son una parte muy delicada. Utiliza productos específicos y cuando acabes la jornada aplica generosamente aceite de rosa mosqueta, los reparará casi de inmediato.
- La piel del resto del cuerpo, a pesar de estar protegida por la ropa, también se deshidrata y sufre descamaciones. Así que, no olvides hidratarla generosamente mañana y noche.
- Y no olvidemos las manos. Si puedes darte un baño de parafina las protegerás antes y después. Utiliza también aceite de rosa mosqueta y envuélvelas en un guante de algodón para dormir.